Miro hacia atrás y solo veo las huellas de mis pasos sobre la ardiente arena. Hoy mi armadura pesa más que nunca, me falta el aire… Dudo sobre tí, sobre mí. ¿Qué estoy haciendo aquí? ¿Por qué me has traído? Siento que desfallezco.
Arrojo al suelo mi escudo, mi espada… me arrodillo con los ojos cerrados y pienso: Abandono. Se acabó. La batalla está perdida.
Arrojo al suelo mi escudo, mi espada… me arrodillo con los ojos cerrados y pienso: Abandono. Se acabó. La batalla está perdida.
Casi sin visión, con los ojos empapados ...
por las lágrimas de la impotencia, miro mi escudo, y ahí está. La cruz bermeja. La cruz patada. La cruz de mi orden, a la que jure lealtad. La que con tanto orgullo he lucido en mi pecho. Miles de imágenes se agolpan en mi cabeza. Sensaciones, recuerdos. Pero lo más importante, recuerdo mis valores, mi ideal, mi doctrina, mi fe…
Ahora se para que nací, para que me formé, porque fui elegido por ti. Ya no dudo, ya no siento dolor. Se que tu estas tras de mi, tendiéndome la mano. Se que muchos me necesitan. No les puedo fallar. No te puedo fallar. No me puedo fallar. Sigo estando aquí. Sigo siendo lo que soy. Sigo siendo TEMPLARIO, y ahora más que nunca.
Frey +José Manuel López
Ahora se para que nací, para que me formé, porque fui elegido por ti. Ya no dudo, ya no siento dolor. Se que tu estas tras de mi, tendiéndome la mano. Se que muchos me necesitan. No les puedo fallar. No te puedo fallar. No me puedo fallar. Sigo estando aquí. Sigo siendo lo que soy. Sigo siendo TEMPLARIO, y ahora más que nunca.
Frey +José Manuel López
Caballero Templario
No hay comentarios:
Publicar un comentario